[titulo]

Se trata de un Proyecto ACETUR (Apoyo Tecnológico al Sector Turismo), financiado por el Consejo Federal de Ciencia y Tecnología – COFECYT. Tiene como beneficiaria a la Municipalidad de Payogasta y fue gestionado a través de la Unidad de Vinculación Tecnológica de la UCASAL.

Está dirigido por el Mg. Arq. Sergio A. Perotta y se vincula con el proyecto 200 del Consejo de Investigaciones, “Identificación y definición de observables para la Consideración y Gestión del Paisaje”. Forma parte de una línea de investigación con antecedentes, aportes y articulaciones de valor con  alcances de internacionalización, con especial inserción en la Facultad de Arquitectura (FAU), investigadores de UCASAL, alumnos y profesores de la Universidad de Florencia.

Entre las actividades desarrolladas en el marco del acuerdo de la UCASAL con la Universidad de Florencia, se cuenta el seminario de investigación y posgrado: “Desarrollo Territorial y Paisajístico en Zonas Fluviales. Aplicación a un recorte del Valle Calchaquí”. 

El seminario contó  con la participación de un equipo de la Universidad de Florencia Italia integrado por las arquitectas profesoras Daniela Poli, Michela Chiti, Elisa Butelli y los alumnos de la Giulia Ballerini, Fabio Iacometti, Davide Perrotta y Alessandro Pedrazzoli.

Investigadores de UCASAL, alumnos y profesores de la Universidad de Florencia

El Seminario aportó la experiencia de planes y proyectos realizados en las regiones italianas de la Apulia y la Toscana, basados en modelos  interdisciplinarios, a partir de la tarea realizada por la denominada Sociedad de Territorialistas, escuela de pensamiento territorial crítico que encabeza el experto italiano Alberto  Magnaghi, experto en Planificación Territorial en la Facultad de Arquitectura de la Universidad de Florencia.

Sostiene Perotta que “en un territorio tan vasto, como el tramo norte del Valle Calchaquí,  con baja densidad de población y grandes distancias a recorrer, es necesario repensar estrategias orientadas a un tratamiento adecuado de los diferentes recursos patrimoniales, con énfasis en su puesta en valor”. ”La consideración y puesta en valor del patrimonio territorial, entendido éste como el conjunto de recursos, prácticas y valores, requiere de nuevas visiones y de renovados instrumentos para su abordaje”.

El planteo implica un cambio de cultura en los modos de gestionar el territorio, a través del monitoreo del paisaje en el marco de estrategias territoriales más amplias y con profundas implicancias en lo político, administrativo y en lo técnico”.

Daniela Poli, profesora titular de Técnica y  Planificación Urbanística, al referirse a la nueva forma de ver el territorio, explicó que “a menudo no vemos cuáles son los elementos profundos del territorio. Nuestro enfoque nace del conocimiento de la historia del territorio, del ambiente, la modalidad con que el territorio se formó en el tiempo, de la observación sobre cuáles son las problemáticas actuales y del trabajo con la sociedad local. Otro aspecto es que entendemos que el urbanismo es un instrumento que no puede ser gestionado solo como técnica. Es fundamental que el proyecto nazca de un co diseño junto a las poblaciones locales”.

Poli, participó en la elaboración de los planes paisajísticos de la Apulia y La Toscana, desarrollados con los criterios  de la Sociedad de Territorialistas, entidad que integran universidades italianas, otras del exterior y representantes de varias disciplinas.

Sobre ambas iniciativas Poli dijo que “son dos planes paisajísticos muy importantes, porque mediante un enfoque multicultural dan la dirección a toda una serie de instrumentos, en varios niveles, para municipios y ciudades.

Explicó que “el plan de La Toscana estuvo elaborado con menor tiempo; el de La Pullia tuvo un tiempo mayor, pero la elaboración de ambos; involucraron mucha población y se relacionaron directamente con el proyecto social que se estaba desarrollando”.

Uno de esos proyectos es un eco museo; con ello, todo el territorio se transforma en un museo a cielo abierto, es un museo que no está encerrado en un cuarto, sino que ocupa el territorio natural”.

“Pero el enfoque fundamental es que el proyecto debe ser hecho por la comunidad, propuesto por ellos”.

“Cuando se trabaja en forma conjunta, por un lado la competencia de los técnicos y la de los habitantes que conocen el territorio, un primer elemento fundamental es que nosotros aprendemos del habitante y paulatinamente, los habitantes van teniendo confianza en el técnico”.

“El rol que tiene este tipo de proyectos es convertirse en fuente que contiene en definitiva, la visión del técnico y del habitante. El proyecto contiene las dos visiones”.

“Sobre el plano, el técnico entiende al habitante y en definitiva el diseño del plan y las normas se hacen del modo en que el habitante ve y comprende su territorio”.

Respecto al nivel de dificultad que supone trabajar de ese modo sobre el territorio, Michela Chiti, profesora de Urbanística en la Universidad de Florencia, explicó que” se seleccionan los interlocutores, se verifica si hay organizaciones de pobladores, de vecinos, se estructuran trabajos con las escuelas y desde el punto de vista de los niños, cada uno de ellos que vuelve a su familia, multiplica la acción.”

Se hacen estrategias que permiten construir cartografía juntos en relación al patrimonio territorial y de ese modo se empieza a construir una forma del territorio.

“Esencialmente, primero los escuchamos, los ayudamos a construir la información que ellos intentan transmitir, luego esa información que se vuelca y se traduce con clave técnica y científica ayuda a un mejor comprensión del territorio.”

Elisa Butelli cursa el doctorado en Urbanística y Planificación Territorial, dijo  al respecto que  “ la visión de nuestra escuela territorialista  no es  la de sectorizar, sino la de integrar porque muchas veces incluso en Italia, el aspecto urbano  no considera al medio rural.”

“La formación de nuestra escuela trabaja sobre la articulación entre la ciudad y el territorio en general. Específicamente la universidad en la que me forme, trata de urbanística y planificación territorial, con un enfoque que no divide, sino que se busca  trabajar los vínculos entre el territorio rural y el entorno de la ciudad.”

“Todo nuestro modo de razonar y de operar apunta a la vinculación entre la ciudad y el medio rural con intervención de disciplinas como arquitectura, agronomía, sociología, geólogos e ingenieros forestales y esa mirada multidisciplinaria permite una mejor comprensión del territorio”.